A una semana del anuncio de Cristina Kirchner, presentando a Alberto Fernández como precandidato a presidente en una fórmula donde ella acompaña en el lugar de vice, se llevó a cabo en Merlo, el primer acto del binomio con motivo de la inauguración del parque Néstor Kirchner y la celebración de la fecha patria.
26-05-2019
El 25 de mayo es, para el kirchnerismo, una fecha muy especial porque fue ese día, en 2003, la asunción de Néstor Kirchner como presidente. Pero además, es la Revolución de Mayo una de las fechas preferidas por Cristina Fernández, quien se sabe, es "fanática" de la historia argentina y le otorga al 25 de mayo el peso de aquella revolución que iba en busca de la independencia, no sólo formal, sino ideológica de lo que sería más tarde la Argentina.
Por eso, calzó doblemente la elección de un 25 de mayo para realizar el primer acto de Alberto y Cristina Fernández juntos, y con el agregado de inaugurarse un parque que ahora será de uso público en Merlo y lleva el nombre de Néstor Kirchner.
Con el Jefe comunal Gustavo Menéndez como anfitrión y maestro de ceremonias, y con un nuevos estilo de acto con estética casi de charla TEG en lugar del tradicional atril, y con tono mucho más calmo que aquellas recordadas oratorias de barricada, primero Menéndez, luego la ex mandataria y por último, Alberto Fernández, fueron los únicos que tuvieron la palabra ante la multitud que llegó hasta Merlo para ser parte de ese día histórico. No faltaba nadie. Desde la militancia y los ciudadanos de a pie, hasta los Intendentes, legisladores y dirigentes de todos los rincones. Nadie quería estar ausente de la foto que mostrara su apoyo a la fórmula "Fernández-Fernández".
En ese marco, Cristina Fernández aseguró que en la Argentina del Bincentenario "había futuro" y llamó a recuperar "ese espíritu de paz", al tiempo que advirtió que "dos dirigentes no podrán hacer todo".
Por su parte, Alberto Fernández, afirmó que trabajará para "sacar del fondo a los cuatro millones de pobres que dejó (Mauricio) Macri", y pidió además, sumar a los que aun no están convencidos en un claro llamado al voto independiente, con una también clara "bajada de línea" de apertura hacia los espacios que por el momento se mantienen por fuera del PJ y Unidad Ciudadana, pero que el binomio espera lograr atraer a partir de la decisión de la propia ex presidenta de no encabezar la fórmula.
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